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Miguel Angel Llorente      

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Experto en agricultura regenerativa, bosques comestibles y alimentos probióticos

Miguel Ángel es agricultor, formador y divulgador con años de experiencia creando sistemas resilientes de cultivo y alimentación. Desde el diseño hidrológico y los bosques comestibles hasta la elaboración de alimentos probióticos con ingredientes silvestres como la bellota, sus talleres combinan saberes tradicionales y técnicas innovadoras para recuperar la conexión con la tierra y la salud.

La trayectoria de Miguel, profundamente ligada a la permacultura, la línea clave y la agricultura regenerativa, le ha llevado a convertirse en formador, conferenciante y asesor en sistemas agroecológicos, agroforestales y de autosuficiencia alimentaria. Con experiencia práctica en bioconstrucción, pastoreo holístico, manejo de suelos sin laboreo y forestería análoga. Miguel ha trabajado en múltiples contextos rurales y urbanos, desde jardines londinenses hasta dehesas extremeñas.

Miguel nos ofrece una serie de talleres de agricultura regenerativa y alimentación saludable que integran su saber técnico con su enfoque práctico y transformador:

Este taller se centra en la comprensión del comportamiento del agua sobre el terreno y en herramientas accesibles para su gestión eficaz, como las curvas de nivel, zanjas de infiltración o labranza vertical. Propone métodos prácticos para aumentar la infiltración y resiliencia hídrica de suelos, clave en el contexto de cambio climático.

Enseña a cultivar alimentos todo el año sin depender de invernaderos, promoviendo huertas diversificadas, herramientas manuales apropiadas, abonos de bajo coste y técnicas de asociación de cultivos. Está pensado para empoderar a familias y colectivos hacia la autosuficiencia alimentaria local.

Aquí se aborda la creación de sistemas agroforestales sucesionales, donde la naturaleza y el agricultor trabajan en sinergia. Se profundiza en la sucesión ecológica, la estratificación vegetal, las podas estratégicas y la elección de consorcios de plantas para sistemas resilientes y productivos.

El taller más sorprendente: enseña a transformar ingredientes silvestres como bellotas, almendras o chumberas en alimentos gourmet fermentados, altamente nutritivos y medicinales. Usando técnicas que no requieren frío ni fuego, se elaboran patés, crackers, bebidas isotónicas, encurtidos y quesos vegetales, favoreciendo la salud intestinal, la resiliencia y el ahorro.

Miguel reivindica la bellota como superalimento olvidado. A través de la fermentación —una técnica ancestral y universal— logra eliminar su toxicidad (taninos) y potenciar su valor nutritivo. Defiende que estos recursos, lejos de ser comida de pobres, son pilares potenciales de una nueva soberanía alimentaria. Tal como él dice, “los alimentos que más abundan a tu alrededor son casualmente los más nutritivos y adaptativos para ti”.

Además, Miguel enfatiza la importancia de la microbiota intestinal en la salud física, emocional y cognitiva. La fermentación, dice, no solo transforma los alimentos, también transforma a quien los produce y consume.


Talleres ideales para personas, colectivos o comunidades que buscan autonomía, salud y regeneración.

Adaptados al territorio, escalables y con fuerte componente práctico: cada taller se puede adaptar al contexto y las circunstancias de cada grupo, al igual que la temática se puede focalizar a la vegetación y frutos predominantes de cada lugar.

Más allá de los talleres: una propuesta de transformación cultural

Cada curso que imparte Miguel es una invitación a cuestionar los modelos agrícolas extractivistas y a reconectar con formas de vida más sostenibles, donde el ser humano se reintegra en los ciclos naturales. Su trabajo, presente también en redes como YouTube e Instagram, ha inspirado a colectivos en España y Portugal, donde colabora con iniciativas punteras en el uso de bellotas y policultivos regenerativos.

Su propuesta no es solo técnica, sino profundamente ética: volver a mirar lo local, lo silvestre, lo olvidado… y descubrir en ello una fuente inagotable de salud, biodiversidad y sentido.